Cuando hablamos de técnicas de estudio, quizá lo primero que hay que decir es que son personales. Cada persona tiene que encontrar la suya, ajustada a su estilo de aprendizaje, a capacidad de memorizar, a sus preferencias en el estudio…
Lo que sí me parece muy evidente es que, a la hora de estudiar, es mejor tener un plan que no tenerlo. Por eso, te voy a contar mi técnica de estudios, la que me ayudó a sacar mi plaza en las oposiciones. No te la cuento para que la uses tal cual, sino para que ayude a encontrar tu propia técnica.
Los 8 pasos del estudio en oposiciones
Para facilitar su comprensión, he estructurado mi técnica en pasos, son los siguientes:
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Paso 1. Lectura activa previa. Imprime el tema y realiza una primera lectura para hacerte una idea de la estructura y los contenidos. Después, realiza una segunda lectura subrayando las ideas principales.
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Paso 2. Explicación de clase. Asiste a la explicación que se realiza en clase del tema. Trata de encontrar conexiones entre tu lectura y la explicación. Busca ejemplos propios para la aplicación didáctica de los diferentes núcleos del tema. Ponlos en común en clase, comparte tus impresiones. Hablar, reflexionar, cuestionar el tema lo hará significativo y te ayudará a comprenderlo.
- Paso 3. El esquema de comprensión. Parte del tema y de tus notas de clase para hacer un esquema propio (de nada sirve un esquema de otra persona) para cada punto del tema. Destaca las ideas principales, relaciónalas entre sí, explícalas y ejemplifica. Al hacer este esquema, ya estás empezando a memorizar, y lo estás haciendo a partir de la comprensión.
- Paso 4. El esquema de repaso. Se trata de un esquema para todo el tema, es decir, debes recoger todo el tema en un folio. Respecto a los esquemas de compresión, en este nuevo omitirás explicaciones y ejemplos. Después, en el momento del repaso, utilizarás este nuevo esquema como guion a partir del cual explicar el tema completo. En caso de omisiones de memoria, acudirás a los esquemas de compresión o al tema.
- Paso 5. Personalización del tema y estudio. Una vez comprendida la estructura del tema, es el momento de incorporarle tus aportaciones, de hacerlo tuyo. Para ello, puedes recurrir a ejemplos propios, referencias o autores con los que te identifiques como profesional, esquemas, ilustraciones… Cuando hayas personalizado el tema te será más fácil memorizarlo. Un tema con personalidad siempre es más atractivo para el tribunal.
- Paso 6. Simulacro de examen. El tema que has memorizado no es el tema definitivo. De nada sirve que hayas memorizado un contenido que no se ajuste al tiempo que tienes para hacer el examen. Así que, en este caso, el simulacro de examen es parte del estudio: tienes que poner en marcha un cronómetro y escribir el tema. Y recuerda: siempre con buena letra y limpieza No son apuntes de la facultad, sino tu carta de presentación como docente!
- Paso 7. Corrección. Revisa el tema que has escrito. Toma como referencia los criterios del tribunal (usa los de anteriores convocatorias si no tienes los de la actual). Aquí los tienes.
- Paso 8. Modificar y memorizar. Parte de los resultados de tu evaluación para modificar el tema si fuera necesario. Una vez ajustado al tiempo de examen y a los criterios de evaluación del tribunal, ya tienes tu tema definitivo. Y si has hecho todos los pasos, ya lo tendrás casi memorizado 😉
